lunes, 2 de agosto de 2010

En el césped

Se han caído mis laureles.
Estaba sentada en el césped.

Se han caído mis collares.
Estaba sentada en el parque.

¡Y las hojas me pinchaban,
oh amigo, me pinchaban!

Estaba sentada en el césped
y me empujaste contra el verde.

Estaba sentada en el parque
y contra el verde me empujaste.

¡Y las hojas me pinchaban,
oh amigo, me pinchaban!

Me empujaste contra el verde
y rompiste mis laureles.

Contra el verde me empujaste
y rompiste mis collares.

¡Y las hojas me pinchaban,
oh amigo, me pinchaban!


Jorge Andreu

(El oleaje de la playa que he visitado estos días me ha traído el recuerdo de las cantigas de amigo -y toda la lírica de tipo popular de la Edad Media-, así que no pude evitar escribir una en castellano).

8 comentarios:

El Pater dijo...

Para que luego digan que esto está anticuado, hombre por favor, nada está anticuado si sigue dando resultados, y los da, vamos que sí los da.

Saludosss

Jorge Andreu dijo...

Jaja, gracias, primo. De anticuado nada: añejo. Con el paso del tiempo la literatura medieval nos ha parecido más rica. Como el güisqui y el vino, mejora con los años.

Un abrazo.

Jorge Andreu

Madison dijo...

Hola Jorge ¿qué tal? estoy contenta de leerte de nuevo.

Jorge Andreu dijo...

Hola, Madi. Pues... muy bien. Tardo más en publicar porque tengo poco tiempo, el poco que tengo lo ocupo estudiando para los exámenes de septiembre del conservatorio. Me alegro de que vuelvas aunque publique muy de vez en cuando.

Culturajos dijo...

Hola Jorge, buena cantiga amigo, estoy contigo, la literatura del medievo es francamente buena, llena de vida, de dolor, de misticismo. No te da envidia pensar que en otra época las calles estaban llenas de juglares cantando las hazañas de algún heróico Cid, o el sufrimiento del amor cortes y la amada intocable. ¡Qué época!
Un abrazo y un placer volver a leerte.

Fumador.

Jorge Andreu dijo...

Amigo mío, qué gusto volver a verte aquí. Compartimos, como sabes, muchos gustos literarios, y según veo también el de la literatura medieval, una de las mejores épocas, para mi gusto, de la literatura. Me alegro mucho de ello.

Un fuerte abrazo.

Jorge Andreu

ARO dijo...

Bonita cantiga. Reiterativa como los usos mandan. Saludos.

Jorge Andreu dijo...

Exactamente, Arobos, como mandan los usos.

"Amigo el que yo más quería,
venid al alba del día.

Amigo el que yo más amaba,
venid a la luz del alba.

Venid a la luz del día,
non trayáis compañía.

Venid a la luz del alba,
non traigáis gran compaña."

Qué hermosura de cantarcillos. Sueño con las liras y los cantos callejeros de este estilo. Natural como el campo.

Un abrazo.

Jorge Andreu